Qué hacer en caso de incendio en Comunidades de Vecinos
La aparición de fuego en Comunidades de Propietarios, por fortuna, es cada vez menos habitual. Sin embargo y a pesar de los avances en esta materia, sucede más de lo que se podría esperar. Y sobre todo, es una de las crisis más complejas a las que se puede enfrentar un Administrador de Fincas.
La actuación ante un incendio en Comunidades de Vecinos se basa en la aplicación de la normativa, que incluye medidas detalladas en el Reglamento de Instalaciones de Protección Contra Incendios (RIPCI) de 2017. En dicha normativa, clave para evitar estos sucesos, se contemplan todos los aspectos que se deben tener en cuenta para el correcto funcionamiento de los sistemas de protección activa contra incendios: diseño, instalación, mantenimiento e inspección.
Cumplimiento de la normativa contra el incendio en Comunidades de Vecinos
Una de las tareas más importantes de un Administrador de Fincas y/o un Presidente de Comunidad es la seguridad de todas las personas en el edificio. En este sentido, la prevención de un incendio en Comunidades de Vecinos es fundamental, afectando tanto a la propia Comunidad como a las empresas de mantenimiento que operan en la misma.
Para asegurar el cumplimiento de la normativa, los edificios tienen un plazo concreto para ponerse al día antes de su primera inspección. Dependiendo de la antigüedad de la finca, se tenían entre 1 y 3 años para ello, pero dado que la norma entró en vigor en 2018, ese plazo está a punto de finalizar en los edificios más modernos.
Normas obligatorias para la prevención de un incendio en Comunidades de Vecinos
Cualquier Comunidad de Propietarios que vele por la seguridad de las personas y la integridad del edificio, así como aquellas que pretenden evitar sanciones por incumplimiento, deben atender a las siguientes normas:
- Disponibilidad de instalaciones de protección contra incendios, puestas a punto por una empresa autorizada por el Ministerio de Industria.
- Extintores en las escaleras.
- Detectores de humo.
- Señalización de emergencia.
- Puertas ignífugas.
- Bocas de incendio.
- Otras que pueden ser necesarias dependiendo de las características del inmueble.
- Revisión técnica trimestral de todo el sistema de prevención contra incendios.
- Puede ser realizada por la propiedad o por la empresa de mantenimiento.
- La inspección debe quedar registrada en un acta a guardar al menos durante cinco años.
- Revisión independiente, cada diez años, por parte de un Organismo de Control Autorizado.
- Los garajes con más de 500 m2, también deberán pasar esta revisión.
- Utilización de materiales y equipos homologados, con certificado de eficacia en la extinción o prevención de incendios.
- Control a cargo de los instaladores y mantenedores.
- La señalización y los elementos de protección tienen un ciclo de vida útil estipulado en cada caso.
¿Qué fincas deben cumplir estas normas?
La normativa únicamente excluye a las viviendas de uso residencial, de uso administrativo (menos de 2000 m2), de uso docente (menos de 2000 m2), locales de uso comercial (menos de 500 m2), construcciones públicas (menos de 500 m2) y aparcamientos (menos de 500 m2). Eso sí, siempre y cuando no se considere que tenga riesgo alto de incendio.
Por tanto, en general, tanto los Administradores de Fincas como los Presidentes de Comunidades de Vecinos deben conocer el reglamento para evitar sanciones y proteger el inmueble contra incendios.
Cómo prevenir un incendio en Comunidades de Vecinos
En el año 2019 se produjeron en España alrededor de 20.000 incendios en viviendas, causando 125 víctimas mortales. Los daños personales se dan por quemaduras, traumatismos, infartos y, sobre todo, intoxicación por inhalación de gases tóxicos (el humo es, frecuentemente, lo más peligroso en un incendio). Entre estos últimos, la causa de muerte es más frecuente en horas nocturnas, por lo que sí, importa la actuación ante un incendio; pero sobre todo, importa la prevención.
La mejor prevención es el cumplimiento del RIPCI, así como la contratación de un servicio de mantenimiento de instalaciones de confianza y, por evitar males mayores, la contratación de un seguro que cubra estas incidencias.
Qué hacer si se declara un incendio en la Comunidad
Si, a pesar de la prevención, ocurre la desgracia de declararse un incendio, estos son los pasos que se deben dar:
- Tratar de extinguir el incendio.
- La detección temprana es muy importante (y por tanto la instalación de elementos como detectores de humo). Si no encontramos el incendio al inicio, este paso no será posible.
- De nuevo, la prevención es de vital importancia. Si no hay extintores, mantas ignífugas o material similar, tampoco podremos evitar eficazmente la propagación de las llamas.
- Actuar rápido es clave, ya que dependiendo de la zona donde aparezcan las llamas, contaremos con tan solo un par de minutos o menos.
- Apartar elementos que puedan servir de combustible, si es posible hacerlo con seguridad (sillas de madera, sofás, etc.).
- Si el incendio es demasiado grande o se propaga, hay que analizar rápido la situación.
- Si la vía de escape está libre de llamas y humo, hay que evacuar hacia la calle.
- Salir sin coger pertenencias y sin perder tiempo, pero sin correr.
- Cerrar todas las puertas al paso.
- En caso de tener las llaves de casa a mano, dejarlas en la puerta por fuera o entregarlas a los bomberos.
- Escapar lo más cerca del suelo posible, donde el aire es más limpio.
- Si es posible, cubrirse la boca con un paño húmedo.
- Llamar al 112, aportando todas las explicaciones posibles (situación, mejor acceso, fuentes de combustible…).
- Si la vía de escape no está libre de llamas y humo, hay que buscar un lugar seguro de confinamiento.
- Buscar un lugar lo más alejado posible del incendio.
- Refugiarse hasta la llegada de los bomberos. En caso de haber ventana o balcón, salir para hacerse ver y propiciar un rescate por el exterior.
- Cerrar las puertas y sellar las rendijas con prendas húmedas para que no entre humo.
- Mantener la calma. Incluso una puerta de madera puede retener las llamas varios minutos.
- Llamar al 112, indicando la situación y donde te encuentras.
- Cuando lleguen los bomberos, es crucial seguir sus indicaciones.
- Si la vía de escape está libre de llamas y humo, hay que evacuar hacia la calle.
- En caso de encontrarse con otras personas o estar a cargo de dependientes, hay que protegerles.
- Primero, hay que asegurarse a uno mismo. Después la zona y, finalmente, a otros.
- Socorrer en caso de necesidad, tratando de tranquilizar a la víctima.
- En caso de que las llamas alcancen la ropa, rodar por el suelo (si es a otra persona, tratar de cubrirle con una manta para apagar el fuego).
- Una vez todo ha concluido, es necesario volver a la normalidad lo antes posible y sin inconvenientes.
- Aviso al seguro para reparar los daños.
- Limpieza de los restos del incendio.
En situaciones como estas, cuando se produce un incendio en Comunidades de Vecinos o viviendas, la tensión y los muchos factores que pueden influir pueden determinar el desenlace. Por eso, lo más importante de todo es la prevención de incendios. Primero, para que no ocurran; y segundo, para que si sucede, sea más sencillo extinguirlo y no tener que lamentar grandes daños. Y después, la vuelta a la normalidad sin rastro de lo sucedido.