Los errores más comunes en el trabajo de Administrador de Fincas

Los errores más comunes en el trabajo de Administrador de Fincas
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El trabajo de Administrador de Fincas puede suponer un desafío, ya que requiere de una amplia variedad de habilidades y conocimientos; así como la capacidad de coordinar y dirigir a equipos diversos.

Algunas tareas que forman parte del trabajo de Administrador de Fincas pueden ser realmente complejas, como por ejemplo:

  • La comunicación con propietarios e inquilinos, que debe ser clara y transparente para resolver problemas y responder preguntas. La diversidad de personas con las que se debe tener relación puede hacer que esta labor requiera de mucho esfuerzo y tiempo.
  • El manejo de finanzas siempre es delicado. Llevar un registro preciso de los pagos y gastos, así como realizar una planificación financiera para los edificios no debería ser muy complicado haciendo las cosas bien, pero la realidad es que es uno de los puntos de mayor conflicto.
  • La supervisión de las labores de mantenimiento también implica un trato con personas diversas, así como una buena planificación y supervisión del mantenimiento de las instalaciones y equipos. Garantizar sus buenas condiciones requiere de formación, conocimiento y experiencia relacionada con muchos gremios.
  • El cumplimiento de la regulación legal no solo necesita de una base de conocimientos para entender y aplicar las normas, sino también un aprendizaje continuo de nuevas normativas aplicables al trabajo de Administrador de Fincas.
  • La gestión del personal, la asignación de tareas y la supervisión del desempeño puede complicarse en función de los recursos disponibles, las necesidades de la finca y el número o singularidad de las personas implicadas.

A estas hay que sumar otras cuestiones sensibles como la seguridad en la finca o la planificación estratégica a largo plazo. Por tanto, teniendo en cuenta que cada una de estas cuestiones tiene sus propios desafíos y requisitos, resulta de gran ayuda contar con una formación adecuada, experiencia, un equipo de colaboradores eficiente y una buena gestión del tiempo y los recursos.

 

Los 8 errores más comunes de un Administrador de Fincas

Para realizar una trabajo de Administrador de Fincas eficaz y eficiente, es importante también conocer los errores más comunes en la administración de fincas, para poder evitarlos:

1. Falta de comunicación.

Cuando se trata de comunicación, hay muchas cosas que pueden salir mal; pero nada peor que la ausencia de ella. Mantener una comunicación clara y transparente con los propietarios es crucial para evitar malentendidos y conflictos.

2. Falta de registros.

Llevar un registro de todo lo realizado y los contactos clave es un auténtico salvavidas. En el trabajo de Administrador de Fincas no se puede olvidar la anotación de toda transacción, pago y mantenimiento realizado para evitar problemas contables y legales.

3. Incumplimiento de normativas.

Los cambios legales a veces dificultan estar siempre al día, pero un Administrador de Fincas colegiado tiene todos los medios a su alcance para evitar esta situación. No estar al día con las normativas y regulaciones legales puede acarrear sanciones y multas importantes.

4. Mala gestión de los gastos.

La mejor forma de llevar una buena gestión es planificar adecuadamente los gastos para no incurrir en gastos innecesarios y problemas financieros. Además, en caso de imprevistos, una correcta gestión de gastos ayuda a unas finanzas saneadas, más resistentes a desembolsos inesperados.

5. Falta de seguridad.

Afortunadamente no es uno de los problemas más habituales, pero no podemos dejarlo fuera de la lista porque debe estar siempre presente en todo lo que hagamos. No tomar las medidas de orden, limpieza y seguridad necesarias puede poner en riesgo la salud de los inquilinos y visitantes.

6. Falta de mantenimiento.

El cuidado de las instalaciones es crucial para la seguridad y la calidad de vida, pero también para la imagen que tienen los propietarios de su propio inmueble. El principal error relacionado con el mantenimiento consiste en no realizar las labores necesarias para evitar problemas de funcionamiento o daños.

7. Falta de profesionalidad.

No actuar de manera profesional y ética puede dañar la reputación de un Administración de Fincas, así como generar conflictos con los vecinos y repercutir de forma negativa en el discurrir de la vida en el edificio.

8. Falta de un plan estratégico.

El día a día puede ser lo suficientemente exigente como para no poder dedicar tiempo a nada más, pero no tener un plan estratégico puede generar una falta de dirección y objetivos a largo plazo, pudiendo estar creando problemas a futuro en la Comunidad de Propietarios.

 

Estos errores, que pueden variar dependiendo del contexto específico de la finca, deben estar identificados para abordar los posibles problemas específicos que puedan surgir. Al lado de colaboradores de confianza, el trabajo de Administrador de Fincas es mucho más sencillo y eficaz. ¡Encuéntralos!